jueves, 20 de noviembre de 2014

El neceser de Ulises: para que una Odisea dure un suspiro.

Antes de ayer Ulises, el hijo de nuestra amiga Llanos, cumplió 26 años y aunque por problemas de salud la fiesta se trasladó a la habitación del hospital dónde está ingresado desde hace unas semanas, la celebración no quedó deslucida por ello.
Ulises es un chico inquieto, tiene en casa un estudio de grabación al que acuden amigos raperos a preparar sus trabajos, mientras él crea montajes de videoclips. Es un figura y a una persona tan creativa no se le puede hacer un regalo cualquiera, así que pensando en un obsequio que pudiera arrancarle una sonrisa se me ocurrió que además de preparar unos cosméticos podia personalizar las etiquetas, hasta el punto que terminé componiendo productos pensando en sus necesidades e inventando historias para cada uno de ellos tomando como tema principal la Odisea de Homero, que para eso comparte nombre con el héroe mitológico.
Y estos son los productos que componen el Neceser de Ulises: para que una Odisea dure un suspiro.





Hechizo de Circe
Es un linimento oleocalcáreo, ideal para las pieles irritadas que necesitan un extra de cuidado. Circe curó con él las heridas de Ulises y consiguió sin necesidad de magia mantenerlo durante un año en su isla, aunque tratándose de una gran hechicera no podemos tener la certeza de que al final conjurara este preciado bálsamo para mantener a su amado cerca.


Elixir de Ulises
Por culpa de este preciado aceite aromático las Sirenas perdieron la cabeza por el pobre Ulises y es que su aroma era para ellas absolutamente irresistible.
Así que mucho cuidado, porque además de suavizar, hidratar y desinfectar la piel, su grato aroma hará que estos seres mitológicos te busquen y acosen hasta conseguir satisfacer todos sus deseos.


Aromas de Ítaca
Para que Ulises no sintiera añoranza de su amada Ítaca los Dioses compusieron éste agua aromática que además de limpiar y perfumar el ambiente le transportaba a sus lugares amados con tan solo pulverizar la estancia.
Podrás sentir el frescor de los pinos de Ítaca al ser acariciados por la brisa marina, el fino aroma de la lavanda en los campos, los limones fragantes del huerto y el verdor del romero y el tomillo en su jardín.



Jabón de Sal
Al volver a Ítaca, Ulises se vio obligado a fingir  locura y para ello pasaba el día arando las playas y sembrando sal en los surcos.  Después de que consiguiera recuperar su reino, los Dioses elaboraron un jabón con esa misma sal para que los mortales limpiemos y exfoliemos nuestra fina piel recordando las hazañas de tan intrépido héroe.